29/5/23.
Se desarrollaron en la mañana de hoy los actos oficiales
En conmemoración del 213er. aniversario de la Revolución de Mayo, esta mañana, en el sector posterior de la Escuela de Educación Especial Nro. 501, sobre calle Gral. Paz, se desarrollaron los actos oficiales conmemorativos de la fiesta patria, los que fueron presididos por el Intendente Municipal de 9 de Julio, Mariano Barroso, a quien acompañó la Jefa de Gabinete, María José Gentile; la Inspectora Jefe Distrital, Leonor Capriroli; Inspectoras de diferentes áreas; autoridades del HCD, el Consejo Escolar e instituciones de la comunidad.
Tras la apertura protocolar de los actos, con el ingreso de las Banderas de Ceremonia, se dio lugar a los discursos alusivos, haciendo uso de la palabra la directora de la Escuela, Luisina Vecchi.
CONCEPTOS DEL INTENDENTE MUNICIPAL, MARIANO BARROSO
“En primer lugar quiero agradecerles por acompañarnos en este día tan especial para celebrar un nuevo 25 de Mayo, que constituye una fecha digna de celebrar y recordar, para tener siempre presente esas historias que forman la esencia y el corazón que nos identifican como argentinos.
Pero las grandes gestas siempre implican esfuerzo, constancia, sacrificios y la fundación de esta nueva nación no fue la excepción, ni se llevó a cabo de un día para el otro. Si bien es cierto que el 25 de Mayo culminó un proceso, ese mismo día comenzó otro, que llevó muchos años de enfrentamientos y luchas para que por fin la Nación sea una y, fortalecida, pueda desarrollarse.
Desde ese día, y en casi todos los momentos cruciales de nuestra historia, tuvimos que enfrentar divisiones, sobreponernos a la frustración y volver a empezar. La revolución misma fue acompañada por muchos criollos, pero también hubo quienes no estaban de acuerdo y querían mantener la dependencia de España.
Siempre existieron para las grandes causas los obstáculos, las derrotas, las opiniones contrapuestas, los desencuentros, la falta de compromiso. Pero, por otro lado, también estuvieron los líderes de aquel Mayo que arriesgaron su vida por una causa tan noble como ser libres y darnos nuestro propio gobierno.
Pero vayamos a lo esencial, repasemos algunos puntos de lo que conceptualmente es una república, algo que hoy nos resulta familiar, pero que en aquel entonces era apenas una idea, un proyecto y, por qué no, un sueño. Una república implica derechos para los ciudadanos, igualdad ante la ley, la periodicidad de los cargos públicos que determina que los gobernantes no deben perpetuarse en el poder, la publicidad de los actos de gobierno, etc.
Lamentablemente, muchas de estas características no se respetaron durante años, aun en tiempos de democracia. Por eso la construcción de la república sigue siendo un trabajo de todos los días, y una deuda que tenemos con nuestro pasado glorioso, pero sobre todo una deuda que debemos saldar definitivamente para generar un futuro mejor.
Hoy, recordando esta histórica Semana de Mayo, debemos recordar a aquellos valientes revolucionarios y honrar su legado. Debemos tomar inspiración en su valentía y persistencia para enfrentar los desafíos de nuestro tiempo.
La historia nos ha brindado un gran regalo: la oportunidad de vivir en una nación libre y democrática. Pero también nos ha encomendado una gran responsabilidad: construir una sociedad justa, inclusiva y próspera para todos los argentinos.
Sin embargo, en este día tan cargado de historia, no quiero dejar de posar mi mirada en el futuro. Nos encontramos en un mundo en constante cambio, lleno de desafíos y oportunidades, y es nuestro deber como ciudadanos comprometidos con el progreso, imaginar y construir el país que queremos para las generaciones venideras.
Como argentinos, pero sobre todo como nuevejulienses, hemos demostrado a lo largo de nuestra historia que cuando nos unimos en torno a un objetivo común, somos capaces de superar cualquier adversidad. Por eso no debemos subestimar nuestro valor y nuestras capacidades, ya que tenemos la fuerza y la determinación para superar los desafíos y avanzar como sociedad.
Hoy, más que nunca, es fundamental que mantengamos viva la llama del patriotismo y el amor por nuestra tierra. Cuidemos nuestros valores, nuestras tradiciones y nuestra cultura, porque son el legado que dejaremos a las futuras generaciones.
Cada uno de nosotros tiene un papel importante en el desarrollo de nuestra comunidad. Desde los pequeños actos cotidianos hasta las grandes acciones colectivas, cada esfuerzo cuenta y puede marcar la diferencia. Si trabajamos en unidad, dejando de lado las diferencias y los intereses personales, juntos podremos construir una sociedad más inclusiva y equitativa.
Por eso, y para cerrar en este día de reflexión y celebración, les pi-do que honremos a aquellos valientes hombres y mujeres que hace tantos años lucharon por nuestra libertad. Su coraje y sacrificio son una inspiración para todos nosotros y nos recuerdan el valor de la libertad y la independencia. Sigamos su ejemplo y trabajemos incansablemente por un futuro en el que todos los ciudadanos podamos alcanzar nuestros sueños y vivir en paz y armonía”.